Desc: Haltet die Welt an: Dirigida por Hartmut Griesmayr. Con Christine Neubauer, Filip Peeters, Martin Feifel, Andrea Lüdke. Una pequeña e idílica ciudad cerca de Bremerhaven. Aquí vive Katja Winzer, que dirige su propia consulta como fisioterapeuta, con su hijo Tobias, de ocho años, y su compañero Jürgen Behrendt, en una antigua granja. Tobias es un chico brillante, independiente y confiable que tiene una relación muy íntima y de confianza tanto con su madre como con Jürgen. Una noche, cuando no pudo volver a casa después de jugar, Katja comenzó una campaña de todos contra todos entre amigos y condujo al niño hasta su casa, sin resultado. Finalmente se vuelve contra la policía. Desde que unos meses antes la niña Levke fue asesinada por un desconocido en la región, un gran contingente de funcionarios y voluntarios inició inmediatamente una búsqueda sensacional. La desesperada Katja es puesta al lado del inspector jefe Roman Maartens: el experimentado policía y padre de familia tiene formación psicológica para cuidar a los familiares en tales casos y aislarlos de la prensa sensacionalista. Pasan los días sin que encuentren a Tobías. Los días se convierten en semanas: entre esperas, esperanzas y autorreproches, la vida de Katja se está convirtiendo lenta pero seguramente en una pesadilla. Mientras Jürgen intenta afrontar la situación con el alcohol y su comportamiento sospechoso es blanco de los investigadores, Roman Katja está a su lado. Incluso amenaza con descuidar a su propia familia a través de su compromiso y compasión. Después de que la mayor operación de búsqueda en la historia de la República Federal de Alemania, semanas después de la desaparición de Tobias, no tuviera éxito, el comando policial no tuvo más remedio que abandonar la búsqueda. Katja se siente traicionada y decepcionada. No fue hasta que atraparon al delincuente sexual que también asesinó al pequeño Levke que Roman encontró una pista candente. Logra persuadir al hombre emocionalmente inestable para que haga una confesión. Para Katja este giro parece demasiado tarde: ya no le ve ningún sentido a su vida. Ella no quiere seguir viviendo sin su hijo.